Muy cerca de mi trabajo me encuentro con un antiguo minicoche: un BMW Isetta 250. Nunca había visto otro igual. Me sorprende que BMW también fabricara automóviles de este tamaño, no es una marca que yo asocie a coches populares.
En mi niñez este tipo de modelos los llamábamos "coches huevo" , ahora son conocidos en ciertos ambientes más selectos como "bubble cars".
Se trata de un diseño -originalmente italiano- que se fabricó en varios países, entre ellos España. En concreto este modelo se produjo entre 1955-1962. Es uno de los primeros intentos de fabricar coches para todo el mundo en la posguerra.
Una de sus curiosidades es que la puerta es frontal.
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